Emotivo tributo al médico, docente e investigador científico Caldeyro Barcia

La mañana de ayer se vistió con las finas hebras de la emotividad cuando autoridades de nuestro país, amigos, familiares y colegas del médico e investigador científico Caldeyro Barcia se juntaron para homenajearlo. La principal excusa fue la presentación del libro publicado por la Editorial Trilce «Roberto Caldeyro Barcia. El mandato de una vocación». Roberto Caldeyro Barcia se graduó como médico cirujano de la Universidad de la República en 1947, desde antes de obtener el título se desempeño en áreas de la salud en forma honoraria. Una vez que egresó se concentró en la tarea de investigador y en la docencia. Fue a mediados de la década del ochenta que lo designaron director Académico del nuevo Pedeciba, la primera institución creada con el objetivo de impulsar el desarrollo de una infraestructura científica nacional. Realizó grandes aportes en el área de la salud materno infantil, concentró los estudios en una línea de trabajo que significó un gran impacto social en el pasado y que aún perduran. Estuvo tres veces nominado al premio Nobel y ahora, a 10 años de su muerte el ministro Jorge Brovetto anunció una noticia que demuestra que sigue estando presente en la colectividad científica: «En la última sesión del Consejo de Ministros presentamos la propuesta para darle el nombre de Roberto Caldeyro Barcia a la Agencia Nacional de Innovación e Investigación que está siendo aprobada en este momento por el Parlamento». Luego dijo a LA REPUBLICA que «si la Agencia Nacional sigue la línea de Caldeyro, va a seguir la línea de crecimiento».

 

La reconstrucción

Para Alcides Berreta Curi fue un gran desafío escribir sobre la vida de un médico, porque su trabajo como investigador estuvo casi siempre vinculado al campo de la inmigración, nunca al científico. Fue difícil, así lo reflejaron las primeras palabras de su discurso: «Después de escribir un libro voy a ser muy breve: La historiografía nacional tiene una deuda muy grande con la ciencia y los científicos uruguayos. Prácticamente científicos y ciencia no han sido objeto de estudio». Existen vacíos muy grandes, ausencias de referencias y documentos que cuenten la historia científica. El autor hizo la reconstrucción a partir de entrevistas a los familiares del doctor Caldeyro Barcia; conversó sobre todo con Ofelia, su esposa. También se basó en lectura de cartas personales, anotaciones, publicaciones y comunicados realizados para los medios de comunicación informando sobre los avances y los beneficios que significaban para la sociedad. Por esto último, el autor del libro resaltó como positivo el diálogo constante del médico con los medios de comunicación, pues se preocupó por mantener comunicada a la sociedad.

Además destacó el profundo compromiso del científico con la Universidad de la República y la constante búsqueda de la excelencia en su trabajo. *