Ventajas. Material liviano y de fácil manipulación

Promueven la cáscara de arroz  para la contrucción de viviendas

Este proyecto será implementado en sectores deprimidos de la costa baja del Pantanoso. La ventaja es que, de haber un realojo, la casa se desmonta y se traslada al lugar donde se vaya a levantar el nuevo barrio.

La propuesta surgió del constructor Miguel de Lima, vecino de Nuevo París, en base a un estudio realizado años atrás por la Facultad de Ingeniería que nunca fue llevado a cabo. De Lima planteó la idea a la Comisión de Obras del Zonal 14, que recogió la iniciativa y ya la presentó al intendente municipal de Montevideo, en una reciente visita que el jerarca comunal realizó a la zona.

De acuerdo con el informe elevado por Miguel de Lima, el sistema fue especialmente diseñado para que la obra pueda llevarse adelante con usuarios no idóneos en la industria de la construcción y menos con posibilidades de manejar componentes pesados durante las diferentes instancias del montaje de los componentes de obra. «Tal es así, que se considera que el género predominante en este tipo de obra es el femenino. El transcurso de nuestra experiencia nos lleva a saber que la presencia del padre en la obra, al tener que cumplir con las obligaciones de su trabajo, menguará, por lo tanto, en términos generales, es a la mujer a la que veremos trabajando y aportando su mano de obra y tiempo por su familia»

De Lima sostiene que «fue así que, considerando que el principal aporte de mano de obra sería femenino, nos inclinamos a proponer un sistema de arquitectura «seca». Con esta metodología se usa ensamblaje, en el cual lo «húmedo» influye lo mínimo, en el que desaparece el mampuesto con su mortero de asiento, en el que no se tiene que considerar ningún tipo de revoque, así sea interior como exterior, en el que no se esté lidiando con encofrados, armadoras, etc., para llenar losas, vigas y pilares; en fin, un sistema que requiera del aporte de una mano de obra que no sea pesada, que busque esa precisión que se requiere al «pegar un botón».

En el sistema propuesto con la sola excepción de la nivelación de suelo, llenado de la platea y el sistema de desagüe de afluentes cloacales, el resto es contrucción «seca».

«Evidentemente, lo planteado requiere de una presencia y apoyo técnico, a los efectos de brindar dirección de obra y guía durante todo el proceso de la misma. Cuando nos referimos a la guía a brindar, estamos haciendo referencia a una enseñanza «in situ» de este sistema constructivo. Si nos proyectamos en el tiempo y consideramos el mantenimiento del inmueble, indudablemente para cada uno de los usuarios que lleguen después de haber construido con sus propias manos su casa, el conservarla será simplemente recordar cómo es su constitución, recordar la participación que se tuvo mientras se levantaba.

Se consideró también el hecho de que no solo el sistema constructivo apunta a la construcción de cero, sino también a lo que podemos denominar mejoramiento de hábitat, llámese aislación térmica, servicios, divisiones internas, etc. En todo momento el sistema apunta a que el usuario pueda, bajo una adecuada dirección, disponer de su hábitat «armario», comprender la esencia de ese proceso y avanzar con el mismo, de forma tal que le permita mantener el control permanentemente de la situación.

 

Paneles silicios – calcáreos

La composición de los mismos es principalmente en base a cáscara de arroz, de donde se explotan al máximo las virtudes y cualidades del silicio. «Mediante un proceso complejo de molienda, tamizado, agregado de otros componentes y mezclado, se obtiene un producto final de excelentes cualidades mecánicas, térmicas, ignífugas, resistencia a la abrasión, e higrométricas además de poder regular y diseñar a priori su comportamiento frente a cada una de las variables antes indicadas. Sus terminaciones superficiales pueden también diseñarse para que responda a diferentes requerimientos, como por ejemplo estéticos,

En lo que respecta a su conformación y dimensionado, los mismos son de 40 cm x 60 cm, variando su espesor en 3, 2 y 1,5 cm según requerimientos que apuntan a obtener una adecuada aislación térmica, resistencia frente a agentes externos (resistencia mecáncia) y humedad (baño – cocina); por lo que variará también la densidad de los mismos en la medida que ayude a conjugar las variables de resistencia mecánica y resistencia térmica.

Otra de las virtudes de estos paneles es que permiten ser moldeables mediante moladora, pudiendo de esa manera adaptarse a los requerimientos de toda buena terminación».

La fijación se efectúa mediante tornillos a guías de madera como «clavaderas». También mediante morteros se puede rejuntar las juntas a los efectos de conseguir un absoluto sellado de la pared.

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