Durazno vivió nueva edición del Festival Nacional de Folclore

Cuando más de 80.000 almas se juntan para presenciar un evento del canto, la música y la danza, sin dudas, ese colectivo está expresando algo, quizás demostrando por dónde pasa el real interés de la gente. Y cuando la mayor parte de esa masa humana que se volcó entusiasta, transgresora, plena de alegría, está conformada por jóvenes, la afirmación que realizamos se acentúa y promueve la realización de consideraciones sociológicas sobre el acontecimiento.

Tres maratónicas jornadas se vivieron en el Parque de la Hispanidad de Durazno, al realizarse el fin de semana pasado una nueva edición del ya mítico Festival Nacional de Folclore, que tímidamente se inició en el año 1973 para luego perpetuarse en el tiempo, consolidándose luego como uno de los festivales de mayor prestigio de la región. A nadie le puede quedar dudas que el Festival de Durazno, en su rubro, es el más importante del país, el más profesional, mejor organizado y que además siempre tiene algo para sorprender a los asistentes.

Recopilar lo que pasó sobre el escenario en los tres días, llevaría demasiado espacio. Igualmente vale reseñar que se mostraron cosas interesantes que motivaron los cerrados aplausos del público y múltiples pedido de bises. Las actuaciones de Jorge Nasser y Pepe Guerra, Maciegas y Luis Alberto Fontes, el viernes, o de José Carbajal y Ruben Rada el sábado. Estos últimos estuvieron casi dos horas sobre las tablas desgranando sus canciones. También fue grata la actuación del carismático y excelente dúo, Larbanois-Carrero, así como de Malena Muyala que por vez primera llegó a Durazno para entregar las versiones del dos por cuatro en una acertada presentación. Sociedad Anónima y los Gauchos Patones, los humoristas de San José se distinguieron en la noche del sábado, a los que se le sumó el excelente y afiatado grupo argentino Los Carabajal que llegó con toda la mística de la chacarera e incluyeron un su repertorio «Vivian» como homenaje a Los Olimareños y especialmente al Pepe Guerra que ha anunciado su retiro. Cerró la jornada el dúo Víctor y Daniel, ganador del Charrúa de Oro 2008, que fueron fieles a la premiación obtenida en la ocasión.

El domingo con un público que desbordó parte de las cuarenta hectáreas que conforman el Parque de la Hispanidad, los aplausos se lo llevaron, Carlos Alberto Rodríguez, Los Yupanqui, un joven grupo de Mar del Plata, que mostró cosas interesantes, preferentemente en la elección de antiguos temas de la música folclórica del hermano país, los humoristas Los Cumpas de Argentina y los ya nombrados, Carbajal y Rada.

Mención aparte para la exposición itinerante de Atahualpa Yupanqui ­su hijo Héctor «Koya» Chavero, estuvo y cantó en Durazno­ y de Wenceslao Varela, lo que permitió observar elementos que formaron parte del acervo de estos dos grandes creadores y cultivadores del canto y la poesía.

La vida de esos dos gigantes de la literatura y la música del Plata, pudieron ser recorridas en diarios, folletos, prendas personales, libros, grabados y fotos que fueron ubicados en el interior de una espaciosa carpa, donde la guitarra de Yupanqui era la anfitriona para los visitantes.

Pero lo más llamativo fue una marea de jóvenes y adultos, que se arremolinó sobre el escenario, cantando, bailando y vitoreando a los cantores, demostrando que los duraznenses están consagrados a las grandes fiestas populares.

 

Los ganadores

Charrúa de Oro: José Carbajal, El Sabalero. Premio Revelación: Luis Alberto Fontes. Revelación musical: Darío Montero.

Payadores. Primer premio Juvenal Martínez (Florida). Segundo premio Ademar Barrios (Durazno). Tercer premio Angel González (Paysandú)

Dúos. Primer Premio: Gustavo y Florencia (Maldonado). Segundo premio Nuevo Horizonte (Soriano) Tercer premio Kilómetro 28 (Canelones)

Recitadores. Primer premio Sebastián Núñez (San José). Segundo premio Gregorio González (Durazno). Tercer premio Sergio Guerrero (Río Negro).

Solistas. Primer premio Mirtha Selvático (Maldonado). Segundo premio Fernando Rodríguez (Río Negro). Tercer premio Gonzalo Pombo (Durazno).