Se estrena "Lejano", una película sobre la soledad y el aislamiento

Mahmut (Muzaffer Özdemir) es un fotógrafo que vive solo en su apartamento en una invernal Estambul. El contestador automático con el que filtra las llamadas le permite mantener un mínimo contacto con el exterior. Pasa sus días dedicado a largas reflexiones, citas esporádicas con prostitutas o mujeres con las que mantiene un vínculo fugaz, mientras se sumerge en Internet o en un zapping más bien caótico que reúne películas pornográficas, noticieros internacionales y algunos clásicos de cine. Su vida es, como ha dicho alguien «una especie de fatalidad apenas asumida».

Esa existencia rutinaria se ve alterada por la irrupción de Yusuf (Mehmet Emin Toprak) primo del protagonista que llega desde su lejano pueblecito a la gran ciudad con el impreciso proyecto de trabajar en un barco. Nuestro fotógrafo no luce particularmente feliz por la invasión de su privacidad perpetrada por ese pariente, trata de librarse de él, no tiene suerte en su intento, y de a poco se establece entre ambos una complicada convivencia.

El filme es básicamente la crónica de dos soledades, el testimonio de una casi imposibilidad de establecer una comunicación. Personajes taciturnos, largos silencios, un firme apoyo en la imagen, refuerzan la sensación de lejanía anunciada desde el título.

Se ha querido ver la influencia de Ingmar Bergman y Andrei Tarkovskii en esta película del turco Ceylan (el segundo es citado explícitamente en determinado momento) que ubica a sus personajes en un universo glacial y hace de ellos el arquetipo de un fracaso casi metafísico. Nunca pierde, sin embargo, una cierta atracción hacia los personajes, una actitud de calidez y ternura. Uno de los mejores momentos transcurre con el protagonista sentado en un banco ante el mar Bósforo: las olas rompen con fuerza en el puerto, y apenas un paquete de tabaco evoca al primo faltante. La emoción corre por dentro, y el filme no la enfatiza.

Tercer largometraje del turco Ceylan, el filme confirma a un creador que debe ser tenido en cuenta.

Nacido en Estambul en 1959, en 1995 dirigió un cortometraje titulado «Kosa». En 1998 debutó en el largo con la pintura pastoril y pueblerina de «El pequeño pueblo», donde se insinuó un talento que «Nubes de mayo» (1999) y «Lejano» confirmarían. Los jurados de los festivales han avalado ese talento: «Nubes de mayo» obtuvo premios en los festivales de Angers, Ankara, Bérgamo, Buenos Aires, Estambul y Singapur, así como un galardón de la Fipresci en la entrega de los Premios del Cine Europeo.

El espectador uruguayo ha conocido también su posterior y atendible «Climas» (2006). Luego hizo «Tres monos» (2008). «Lejano» fue el Gran Premio y el Premio masculino de interpretación compartido por los dos actores en Cannes 2003.