¡Por fin! 11 de julio de 2004, 11:16hs

Uruguay ganó y se ilusiona

Finalmente luego de varios tropezones, la Selección al mando de Fossati pudo saborear una victoria, que además permite a los celestes avanzar a la siguiente fase de la Copa América, a la que llegaron sin grandes luminarias.

Pero el partido fue malo, y Uruguay jugó rematadamente mal el primer tiempo, aunque mejoró en el complemento, pero más por ganas y coraje de algunos de los jugadores que con criterio para jugar al fútbol. Porque de eso nada de nada, aunque lo importante para el hincha hoy, a la vista del resultado, es que se ganó y a otra cosa.

Poco importa que esta selección ecuatoriana sea quizás de las peores del torneo, que nuestra Selección haya cometido una serie de errores disimulados apenas por los goles charrúas, que en defensa haya hecho agua fundamentalmente por el flanco derecho, que se abusó del pelotazo frontal, que se perdió muchísimo en esa lucha del mediocampo y que arriba se estuvo «rengo», porque funcionó solo Bueno, ya que Darío no aportó nada.

Pero en cuanto a lo positivo, hay que decir que esta Selección tiene desde la llegada de varios nuevos referentes, más temple, no se deja avasallar, y tiene rebeldía; supera los momentos emocionales críticos como fue el gol de Ecuador y tuvo resto para ir a buscar la victoria.

Quizás le faltó cerrar el partido antes y no terminar con angustias ante una débil Selección ecuatoriana, que además le hizo un gran favor a Fossati, porque al mejor del equipo y lo demostró cuando entró Salas, lo tenían en el banco de relevos.

Golazo de Forlán

Uruguay despertó de su letargo con una corazonada de Forlán, que avanzó unos metros y sacó un tiro espectacular que venció al endeble portero ecuatoriano, cuando el reloj marcaba el primer cuarto de hora del complemento.

Sin embargo minutos más tarde Fossati, se apuró al querer cerrar el partido y mandó al «Ruso» Pérez a la cancha en lugar de Forlán. Uruguay se replegó y Ecuador se fue arriba, hasta lograr el empate antes de la media hora, por intermedio de Salas, que aprovechó un grueso error de cierre celeste. Sin embargo, lo que escribimos líneas arriba, este equipo tiene garra, rebeldía y a Carlos Bueno, que nuevamente con su olfato de goleador anotó y puso a gritar a todo el país.

Después el sufrimiento, al que los uruguayos estamos acostumbrados, aunque, en rigor, con esta selección ecuatoriana, debió terminar el partido con victoria y «súper» tranquilos.