PORTUGAL  NO QUIERE ARREGLO

Portugal cerró gran parte de la clasificación con la goleada tremenda ante Corea del Norte por 7-0. Un empate en la última fecha ante Brasil lo clasifica independientemente de lo que ocurra en el choque entre Costa de Marfil y los asiáticos. Brasil está otro lado, aunque una derrota puede comprometer su liderazgo del grupo por la diferencia de goles. Algunos ya rumorean que se pactará un empate para que todos se vayan contentos.

En el vestuario luso hay división. Algunos quieren jugar para ser primeros, otros prefieren la idea de buscar esa igualdad de común acuerdo y asegurarse el lugar en la próxima fase. Cristiano Ronaldo está entre los que quieren salir a jugar en serio. «Jugamos contra una de las mejores selecciones del mundo. Para nada va a ser un partido amistoso. Estamos en un Mundial y queremos ganar», explicó CR7. Un elemento importante del partido que se viene entre portugueses y brasileños es la ausencia de Kaká por la inentendible expulsión que sufrió ante los marfileños. «Es una pena. Ya hablé con él para darle ánimos. No merecía la roja porque no hizo nada. Sería bueno que FIFA le retire la sanción», reflexionó Ronaldo acerca de su compañero en Real Madrid.

Ronaldo se sacó las ganas de convertir en una Copa del Mundo pero vive ese logro con tranquilidad. «Me entraron ganas de reír. No estaba ansioso por marcar. Sabía que tarde o temprano iba a llegar», declaró el lusitano.