1958: Nacional campeón de la Teresa Herrera

Nacional arribó al año 1958 cargando la triple corona a sus espaldas, tras lograr los campeonatos uruguayos de 1955, 56 y 57.

Fue un año particular para la historia del planeta, dejando el fútbol de lado, debido a que los franceses Lejeune, Turpin y Gauthier descubrieron que la trisomía 21 es responsable del mongolismo. Además, en Estados Unidos cada vez le daban más importancia al espacio lejano de la tierra, creando la Agencia Espacial NASA, la que le traería años posteriores significativos resultados a la ciencia.

Mientras tanto, en el aspecto deportivo, Nacional en su afán de seguir marcando su excepcional historia futbolística en el mundo viajó a España, donde la madre patria lo esperó con sus brazos abiertos en época veraniega.

La XIII Copa Teresa Herrera aún se mantenía virgen para los uruguayos, ya que las vitrinas de nuestro país no lucían el estupendo galardón que resultó y resulta ser este trofeo.

El 15 de junio de 1958, el Estadio Riazor de la Coruña (Galicia, España) tendría un épico partido en su campo de juego.

Nacional de Uruguay se enfrentaría a Flamengo de Brasil, dos instituciones de riquísima historia local e internacional, reconociéndose en Europa la trascendencia del compromiso.

Victoria ante Flamengo por 2-1

De trámite parejo e intenso, bajo el arbitraje del español Ortiz de Mendívil, los aficionados observaron cómo el conjunto uruguayo se impondría al brasileño en cifras de 2-1.

Héctor Núñez y Guillermo Escalada fueron los autores de los goles compatriotas, mientras que el equipo norteño concretó su anotación por intermedio de Duca.

En aquella recordada gesta, Nacional alineó a: Walter Taibo, Horacio Troche, Edelbert Di Fabio, Roque Fernández, Jorge Gómez (Ruben González), Juan Carlos Mesías, Héctor Núñez, Raúl Núñez, Juan Angel Romero, Héctor Rodríguez y Guillermo Escalada.

Por su parte, Flamengo, se presentó con: Fernando, Jover, Milton, Jordán, Tomires, Daquinha, Saba, Duca, Henrique Frade, Mamelinho y Alfredinho.

Un año fatídico en fallecimientos

Si bien 1958 resultó grandioso en cuanto a esta gran gesta deportiva por lo que significó en su momento y en años posteriores, los presididos en ese entonces por José Añón padecieron importantes pérdidas humanas, ligadas directamente con la institución.

El 4 de julio, Pedro Manini Ríos (primer presidente honorario de los albos), quien formó parte de la cultura de nuestro país, y que además presidió la Asamblea efectuada el 14-5-1899 en la cual se le dio vida al Club Nacional de Football dejó de existir, hecho que provocó profunda congoja en la sociedad oriental.

Además, la enseña tricolor soportó esa temporada otra imborrable desaparición. José María Reyes, presidente tricolor en los años 1906, 07 y 36 también dejó su legado. Bajo su mandato, en 1906 el club había obtenido la Personería Jurídica. *

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