Los Estados Unidos de Sudamérica

En la reunión en la ciudad argentina de Puerto Iguazú, culminada el 9 de julio, el Mercosur ha logrado un notable éxito, integrando como socio a Venezuela y a punto de culminar acuerdos similares con Colombia y Ecuador, con los que todos los países de América del Sur, antes de terminar 2004, habrán estado unidos en un gran acuerdo comercial.

Habrá que agregar además a México, que solicitó adherirse al grupo como socio y comenzará las negociaciones para un tratado. Con lo que la unión no será sólo sudamericana, sino latinoamericana.

Yo nunca pensé que podría llegar a ver esta concreción del ideal de la unión latinoamericana, el de Artigas, Bolívar y los patriotas de la independencia, el de Juan Bautista Alberdi y el que en 1948 sirvió para despertarme a la vida política, a los 19 años, cuando en Bogotá el 9 de abril, en los días en que se fundaba la OEA, asesinaron a Jorge Eliecer Gaitán, líder del Partido Liberal de Colombia. La CIA se fundó en 1947 y esta puede haber sido una de sus primeras acciones en América Latina. Junto a Gaitán murió un campesino, Manuel Marulanda Vélez, y otro trabajador rural, Pedro Antonio Marín, adoptó el nombre de Marulanda y fundó las FARC, la guerrilla que continúa hasta hoy y sigue luchando 56 años después.

En la Facultad de Derecho fundamos con otros compañeros AULA (Acción Unitaria Latino Americana) ese mismo año 1948 y dos años después, en 1950, con Servando Cuadro, Roberto Ares Pons y León Cestau entre otros, la Alianza Universitaria pro Federación Latino-Americana. Como resumen de esas discusiones publiqué una pequeña obra: «Los EEUU de América Latina».

El Mercosur es hoy un acuerdo comercial pero va en camino de ser mucho más: una alianza política para crear un Estado que reúna en un solo país a todos los actualmente desunidos países del sur, del mismo modo gradual en que se creó la Unión Europea, pero en mucho menos tiempo, porque ya existe la experiencia.

Hoy todo el mundo está uniéndose en bloques regionales competidores entre sí y la forma de no seguir siendo explotados por los países centrales es encontrar en la unión la fuerza. Es la hora de crear las instituciones políticas: un Tribunal de Controversias embrión de un Poder Judicial, un Parlamento incipiente que deberá desarrollar un sistema que permita superar las asimetrías entre países pequeños y países grandes y se elija por voto universal y un Poder Ejecutivo con un gabinete, donde exista una Comisión como la europea y unos comisariatos permanentes que lleven adelante la gestión.

El Uruguay debe apoyar este impulso y no poner palos en la rueda, porque existen formas ya puestas en práctica en otros lugares, que permiten superar la diferencia de tamaño. Montevideo es hoy la capital del Mercosur porque está ubicado entre los dos grandes Argentina y Brasil, un ejemplo de que en la unión se encuentran nuevas y renovadas posibilidades.

A luchar pues, por los EEUU de Sudamérica y la Unión Latinoamericana. *

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