El futuro es un Instituto de Seguridad Social

Un Instituto de la Seguridad Social comprende la Previsión Social, donde deben incluirse todas las Cajas de Jubilaciones y un Sistema Integrado de Salud, que además de ASSE, hoy todavía en el Ministerio de Salud Pública, incluirá a las mutualistas.

Hoy están en el Banco de Previsión Social lo que fueron la Caja de Industria y Comercio, la Caja Civil y la Caja Rural, fundadas en 1919, 1905 y 1950. Se llamó Banco porque Nardone decía en sus audiciones que esas Cajas debían funcionar con la rapidez de un Banco y en la Constitución de 1966 el Ruralismo impuso ese nombre, aunque un Instituto de Seguridad Social no es un Banco.

En esos años fueron apareciendo otros institutos, como la Caja Bancaria en 1925, la Caja Profesional en 1954, las Cajas Policial y Militar en las que no se pagan aportes y están ciento por ciento a cargo del Estado desde siempre. Y no sé si me olvido de alguna.

En el Sistema Integrado de Salud están el Ministerio de Salud Pública, con muchos hospitales públicos, el Hospital de Clínicas, que Luis Batlle Berres entregó en 1949 a la Universidad en su centenario, a solicitud del secretario general de la FEUU, Teófilo Collazo, pero al que los gobiernos siguientes abandonaron a su suerte, al extremo que parecía que el Ministerio y el Clínicas hasta 2005 fueran dos países distintos.

Ante la ausencia del Estado en el cumplimento de sus deberes, desde 1856, nacieron las primeras mutualistas, que han sido una buena cantidad.

Todas estas entidades pasarán a integrar el Instituto Nacional de la Seguridad Social, en los grados de autonomía que la realidad indique, pero donde el Estado se involucre al máximo en la Previsión Social apoyando y aportando los recursos necesarios para que todas las Cajas salgan adelante al tiempo que se racionaliza la relación entre todas ellas.

En la Salud, dejando de ser omiso y aportando los recursos para adquirir los aparatos más caros de la Medicina hoy, de modo que los médicos no tengan que asumir tareas de empresarios en perjuicio del ejercicio de su profesión, a la vez que se aprovecha mejor el tiempo en ese material hoy subutilizado.

Aquí es donde será útil la reforma tributaria, en la que el 70% y 80% de la gente no pagará más que hasta ahora, pero los que ganan más financiarán a un Estado que será más racional y menos dispendioso que el actual.

El capitalismo nos da seguridad con la falta de trabajo, y el socialismo puede ser más seguro y dar empleo a toda la población, pero debe combatir a la burocracia del aparato del Estado, que consiste en reclamar cada día más y hacer cada vez menos.

Para eso es la Reforma del Estado, para aplicar la descentralización y el gobierno electrónico, luchando contra la burocracia.

Todo esto junto a la lucha contra la indigencia y la pobreza del Ministerio de Desarrollo Social, que ahora aplicará el Plan de Equidad.

Ha terminado julio y ahora ya cada uno sabe la retención que se aplicará o no por el IRPF. En España en 1977 muchos se fueron a Suiza o Andorra y a los tres meses volvieron, porque no pasaba nada.

Nuestro gobierno pues, está cumpliendo con su programa y recuperando al Uruguay que recibimos en escombros. *