La mafia albanesa es el nuevo "pulpo" de la venta de droga en Europa

El narcotráfico en Europa está en manos de las mafias albanesas y de los países de la ex URSS, una gran Cosa Nostra del Este, que cuenta con un capital de 20-30.000 millones de dólares «sucios», según se afirmó hoy en una reunión entre representantes de Italia, España, Francia y Alemania.

Las nuevas organizaciones criminales del Este europeo son como una especie de pulpo con tentáculos legales, visto que logran operar de manera lícita por medio de sociedades inmobiliarias, bancos y otras empresas, auténticas lavanderías de dinero «sucio», añadieron los expertos.

Entre los negocios clave de las organizaciones criminales del Este se destacan el tráfico de armas, el creciente tráfico de seres humanos –sobre todo prostitutas precisamente desde los países del Este– además del ya «tradicional» narcotráfico.

Los expertos presentes en la reunión de Roma destacaron por otra parte que una de las grandes alianzas operativas de las mafias albanesas es con los narcotraficantes colombianos, hecho que les permite mantener el control del mercado de la cocaína.

Para los países europeos, uno de los problemas principales es demostrar que el origen del dinero introducido en el continente por «respetables» ciudadanos de Rusia y de otros Estados de la ex URSS es ilícito, añadieron los expertos.

Entre los cambios más importantes de los últimos tiempos en el «mapa» del narcotráfico mundial, se destaca el rol de las organizaciones albanesas, que han pasado a estar en la primera línea del tráfico de drogas, desplazando a las mafias italianas.

Los albaneses lograron pegar el gran salto a finales de los años ’90, gracias sobre todo a una posición geográfica privilegiada.

Albania opera en efecto como un gran centro de distribución, ya que es la puerta de ingreso de las drogas que llegan de Asia y de América del Sur, pero también la salida natural para los ricos mercados consumidores europeos, como Italia o Alemania.

La droga clave de los albaneses es la heroína, que las mafias de Tirana y las otras ciudades del país obtienen a su vez de los clanes turcos.

Un kilogramo de heroína –por ejemplo del tipo «T4 beige»– es pagada muy poco por los albaneses, alrededor de unos 10.000 dólares.

Según explican los expertos antimafia italianos, el corazón del narcotráfico albanés se encuentra en Durazzo, la ciudad portuaria muy cerca de la costa italiana donde cinco familias se dividen el gran negocio de la heroína.

«España no tiene ninguna intención de «dejarse colonizar por las corrientes del dinero ‘sucio’ y por esta razón tanto la policía como el Banco Central mantienen un nivel de guardia muy alto», dijo uno de los presentes en la reunión, el español Jesús Espigares Mira.

El francés Patrick Riou destacó a su vez que «los rusos no vienen a Francia para cometer delitos, sino para invertir gran cantidad de dinero en el sector inmobiliario». (ANSA)