ARSENALES ISRAELIES CONTRA IRAN

Se informó por parte de The Times de Londres que Arabia Saudita había autorizado el uso de su espacio aéreo por los bombarderos israelíes para atacar las instalaciones nucleares iraníes. Pero al tiempo que ello fue desmentido por el gobierno de Riad, se señaló que estaba previsto otro corredor aéreo con esos fines, que pasaría a través de Jordania, Irak y Kuwait. Una información atribuida a fuentes del Pentágono señalaba que un ataque israelí a instalaciones nucleares iraníes había sido planificado con el aval del Departamento de Estado. A todo esto, se produjo la visita del ministro de Defensa de Israel, Ehud Barak, a Washington, con importantes consecuencias en materia armamentística.

Barak logró el suministro de armamento de gran poder, en especial de bombas Jdam, fabricadas por la Boeing que, al agregárseles un dispositivo de cola con direccionamiento provisto por GPS, pueden ser lanzadas a más de 60 kilómetros del objetivo y se dirigen automáticamente hacia él. Estas bombas fueron equipadas recientemente con un sistema de direccionamiento por láser que las torna aún más precisas. Según el diario israelí Haaretz, dichas bombas ya fueron utilizadas durante la segunda guerra contra el Líbano en 2006, y en la operación Plomo Fundido contra Gaza en diciembre 2008-enero 2009.

Un estudio del especialista italiano en estos temas Manlio Dinucci señala que Barak pidió al gobierno de Washington (y obtuvo) que se aumente en un 50% los «depósitos de urgencia» que las fuerzas armadas de EEUU instalaron en Israel en diciembre pasado. El diario Haaretz reporta que dichos depósitos contienen misiles, bombas, municiones para la aviación, vehículos blindados y otros elementos, dispuestos de forma de garantizar «un acceso fácil y rápido a la parte israelí».

El autor asegura que parte del armamento destinado a los «depósitos de urgencia» proviene de Camp Darby, la base logística del ejército de los Estados Unidos (US Army) situada en Italia, entre Pisa (la ciudad de la torre inclinada, que cuenta con un aeropuerto para uso civil y militar, con personal exclusivamente militar en la torre de control) y el puerto toscano de Livorno, sobre el Mediterráneo. Los depósitos situados en Israel son una suerte de sucursal de Camp Derby. La 31ª Escuadra de Aprovisionamiento de dicha base es también responsable de los depósitos en Israel, que aseguraron el aprovisionamiento de las fuerzas israelíes durante sus ofensivas contra el Líbano y contra Gaza.

El estudio precisa que entre las municiones que Estados Unidos está entregando a Israel se encuentran las «ojivas penetrantes pesadas» como las Blu-117, de una tonelada de peso y adaptadas a los ataques contra los bunkers iraníes. Armas de este tipo vienen acumulándose también en la base estadounidense de la isla Diego García, sobre el océano Índico, a la que han sido enviados los poderosos bombarderos B-2, a los que se otorga la capacidad de perforar las defensas antiaéreas.

Estos bombarderos ya están preparados para destruir miles de objetivos en Irán en pocas horas. Tal es lo que sostiene Dan Plesh, director del Centro de Estudios Internacionales de la Universidad de Londres. Y agrega que Arabia Saudita está potenciando sus 150 cazabombarderos F-15, fabricados por la Boeing, dotados de tecnologías ultra modernas que aumentan su eficacia en los ataques nocturnos y están en condiciones de operar conjuntamente con la fuerza aérea estadounidense.

Todo esto lleva la inquietante situación a límites extremos. En este marco EEUU, Rusia y Francia propusieron realizar una reunión de especialistas del sector nuclear con representantes de Irán, todo ello bajo los auspicios de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA). El anuncio lo formuló el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguei Lavrov. No sabemos si esto contribuirá a hacer primar la sensatez y detener el curso hacia la confrontación armada en la región. La iniciativa conjunta formulada oportunamente por Brasil, Turquía e Irán podría haber abierto un cauce hacia una solución pacífica y con garantías para todas las partes, pero ello fue desechado por la mayoría del Consejo de Seguridad.