Consternación en Francia por agresión contra el alcalde de París

 

Numerosos políticos franceses se declararon consternados este lunes tras la agresión sufrida durante el fin de semana por el alcalde de París, Bertrand Delanoe, quien fue apuñalado por un hombre de 39 años que dijo odiar a «los políticos y a los homosexuales».

Tras ser interrogado por la policía, el autor de la agresión, Azedine Berkane, declaró el domingo que había actuado de forma «aislada» y «sin premeditación» y añadió que «no amaba a los políticos y en especial a los homosexuales».

El alcalde socialista de París, que ganó las elecciones municipales en 2001, había revelado públicamente su homosexualidad en noviembre de 1998.

Operado el domingo en el hospital parisiense de la Pitié-Salpetriere, Delanoe «pasó una buena noche», explicó este lunes Anne Hidalgo, quien lo reemplazará al frente de la capital francesa mientras esté hospitalizado, probablemente unos ocho días.

Hidalgo precisó que los «médicos son tranquilizadores», que «la herida no era anodina y que sus consecuencias eran muy dolorosas».

En la noche del sábado al domingo, Berkane agredió con un cuchillo al alcalde en los salones de la alcaldía, abarrotados de público en media de la primera «Noche en Blanco», una fiesta que se celebró durante toda la noche en diferentes lugares de la capital.

El agresor, un desempleado que vivía en las afueras de París, ha sido interrogado por la policía y podría ser procesado por «intento de homicidio voluntario», según fuentes policiales. Berkane vivía con sus padres en Bobigny, en las afueras del noreste de París. En junio pasado, fue internado unos días en Lourdes (suroeste) después que su madre denunciara su desaparición y señalara que tenía problemas psicológicos.

Según fuentes de la investigación, el agresor siguió el camino «de un pequeño delincuente» de los suburbios de París. Desde joven, efectuó varios robos, hizo tráfico canabis y lo consumió, y estuvo encarcelado varias veces.

Numerosas personalidades francesas se mostraron conmovidas tras esta agresión. En los últimos meses, la clase política francesa sufrió varios ataques. En marzo, un hombre disparó en el pleno municipal de Nanterre (oeste de París), matando a ocho personas.

El autor del ataque se suicidó el 28 de marzo tras tirarse desde la ventana de la sala donde lo interrogaba la policía.

El pasado 14 de julio, durante el tradicional desfile de la Fiesta nacional francesa, un ultraderechista disparó contra el presidente Jacques Chirac, sin alcanzarlo.

El ministro de Asuntos Sociales, François Fillon, declaró que la agresión contra Delanoe revelaba «cierta intolerancia respecto a las instituciones en general y a los que las representan como los políticos o las fuerzas del orden».

El primer secretario del Partido Socialista, François Hollande, dijo que Denaloe «demostró ser valiente y que también puso en evidencia su pasión democrática».

La Liga Internacional contra el Racismo y el Antisemitismo (Licra) se declaró «horrorizada» por lo ocurrido al alcalde.

Por su parte, el primer ministro Jean-Pierre Raffarin, se declaró favorable a que se «refuerce el conjunto de los dispositivos de seguridad para que la sociedad francesa sea una sociedad apaciguada». *