Busti: "Si tuviera el dinero yo pondría dos o tres papeleras"

La frase en cuestión fue dicha fuera de micrófonos, al inicio de un espectáculo musical de la cantante de tangos Adriana Varela, y fue divulgada a las 21.00 horas de ayer por una emisora radial argentina. Este sorprendente cambio de posición fue confirmado por LA REPUBLICA al cierre de nuestra edición por altas fuentes del gobierno provincial argentino, y luego por autoridades del Ministerio de Relaciones Exteriores de nuestro país.

Desde hoy podemos decir que se estaría dando por finalizada la controversia de si «papeleras sí, papeleras no». Busti hizo una revelación que muchos uruguayos pensaban que se traía entre manos. Del otro lado del río dijo: «Si tuviera el dinero, pondría dos o tres papeleras». Desde el gobierno nacional, se insinuaba que Busti no estaba en contra de las papeleras, sino que por el contrario, las quería llevar a su feudo, porque eso le generaría grandes réditos desde el punto de vista personal y económico.

Busti, desde que el nuevo gobierno progresista uruguayo expresó oficialmente que estaba de acuerdo con las «polémicas» papeleras, empezó a modificar su posición de que era productivo y necesario contar con papeleras para «toda la gran casa argentina». Empezó con una campaña en la que defendió a capa y espada la postura de que las papeleras «no eran buenas», y que Uruguay, al traerlas para su «casa», podría estar afectando no sólo a sus habitantes, sino a todos sus vecinos, los entrerrianos.

Esta gran telenovela de Corín Tellado, tal como la definió un diplomático argentino, a esta controversia de si papeleras sí o no, llega a su fin.

A partir de ahora se manejan varias versiones sobre el motivo del cambio de posición. Una que sonó con fuerza ayer fue que el presidente Kirchner se cansó de tener que atenuar las tensiones que desde hace meses se venían produciendo entre los gobiernos uruguayo y argentino, y que hubo un «apriete» para que modere sus declaraciones.

Cabe recordar que el presidente Tabaré Vázquez retiró temporariamente a su embajador en Argentina, «congeló» las relaciones diplomáticas por las afirmaciones de Busti, quien antes quería tener las papeleras, y luego argumentando de que estas no eran necesarias e incluso una molestia para el ordenamiento territorial y el medio ambiente, dijo que los uruguayos seguramente tendrían algún interés por apoderarse de éstas.

A esto se sumó una andanada de críticas al subsecretario de Medio Ambiente, Jaime Igorra, quien desde aquí le respondió varias veces, y últimamente dirigió sus críticas al canciller Gargano.

Kirchner, según indicaron fuentes diplomáticas, consideró que las pretensiones de Busti, eran como «una piedra en el zapato» que erosionaba la hermandad de uruguayos y argentinos.

Desde Uruguay se pensó que una vez que pasaran las elecciones en Argentina las denuncias de Busti se aplacarían. Pero no fue así. Igorra dijo que quizá se trate de una «guerra económica».

Pero lo cierto es que Busti reiteró que las papeleras uruguayas no era de su agrado, pero anoche reivindicó el poder llevar las papeleras para su «casa». No obstante, destacó una indisponibilidad económica que truncó su intención de llevarlas para su provincia, antes de la resolución de colocarlas en Uruguay.

Anoche manifestaron jerarcas del gobierno uruguayo, que si esto se llega a confirmar en el día de hoy será un alivio para el desempeño del Ejecutivo nacional, que desde hace meses tiene que dedicar esfuerzos para repeler los agravios. Incluso, mencionaron que podría dejar a un lado la incidencia, que aunque mínima, podría tener en el turismo de nuestro país. Es que los cortes de rutas en Argentina y las protestas con la distribución de volantes con la foto del presidente de los uruguayos, y la inscripción de: «Vázquez genocida», preocupaban a nuestros gobernantes.

Ayer, los dichos de Jorge Busti, antes de ingresar al recital de Adriana Varela fueron lapidarios: «Si tuviera el dinero yo pondría dos o tres papeleras».

LA REPUBLICA realizó un llamado telefónico a Argentina para interpretar las afirmaciones de Busti, que dos horas antes lo había anunciado una emisora radial argentina, y lo corroboró.

«Le tengo que reconocer. Antes no estaba de acuerdo. Pero ahora, me parece que desde el punto de vista del ordenamiento territorial sería bueno que en mi casa pusiera más de una papelera».

«Como habitante de esta ciudad, me gustaría que en cada esquina hubiera una papelera», reconoció Jorge Busti. Hay pocas, y la mayoría rotas.

Dijo que en su «gran casa» tiene una vieja papelera en la cocina, pero si le alcanzara el dinero, colocaría dos en su dormitorio, ya que tiene muchos recortes de prensa de sus afirmaciones sobre si «papeleras sí o no», y que no sabe dónde colocarlo por la falta de espacio. También, entiende que tener varias papeleras puede servir para mejorar su gestión ambiental, y mejorar su imagen de hombre público pulcro.

Como ustedes se darán cuenta. Los cortes de rutas en Argentina continuarán y las polémicas de si las papeleras son contaminantes también. Que la inocencia les valga. *