Cayó el último túnel del MLN

Los senadores Eleuterio Fernández Huidobro y José Mujica reconocieron a LA REPUBLICA que la red de túneles secretos perteneció al Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros. Ante el hallazgo la dirección nacional del MLN se reunirá mañana para analizar el tema y sus posibles repercusiones.

La primera alarma la dio el equipo de trabajadores municipales que actuó para rescatar a una camioneta que quedó atrapada por el pozo que provocó el hundimiento. Luego de retirar el vehículo, una camioneta Fiat Fiorino de color rojo, los empleados municipales que descendieron a retirar escombros se encontraron con una sorpresa, en la dirección norte debajo de la calle había un hueco que se prolongaba más allá de donde alcanzaba la vista.

El funcionario municipal que constató el hecho pretendió avisarle al supervisor que estaba a nivel de calle.

Cuando el trabajador de la IMM mostrando su sorpresa dijo: «Aquí hay un túnel», sorpresivamente un hombre de pelo corto lentes de sol y un prolijo traje se le acercó le dijo algo al oído y lo condujo hacia un auto con chapa de alquiler que estaba estacionado en la esquina. Desde ese momento ningún operario municipal pudo bajar al enorme bache y las cosas quedaron como estaban hasta que se llenó de agua por la tormenta de la noche.

Esta versión la brindó a LA REPUBLICA un preocupado trabajador de la Intendencia de Montevideo, que habló a condición de que mantuviéramos su nombre en reserva.

El trabajador municipal, que acreditó debidamente su condición de tal y que incluso exhibió una foto de prensa donde se lo ve trabajando en el lugar de los hechos, señaló que su compañero (de nombre «Roberto») mantuvo un fuerte altercado con un misterioso hombre de lentes oscuros.

Según narró el asombrado funcionario comunal: «La cosa estaba rara desde que llegamos. Además de los vecinos que estaban lógicamente enojados y preocupados notamos la presencia de gente extraña». Ante la pregunta de por qué los calificaba como «extraños» respondió: «Claramente no eran vecinos, se mantenían al margen de los corrillos y estaban prolijamente vestidos».

Consultado por LA REPUBLICA sobre cuántos eran esas personas que el calificaba como «extrañas», el funcionario comunal indicó: «Por lo menos cinco».

El trabajador de la Intendencia Municipal capitalina insistió: «Roberto vio algo en el pozo y desde ese momento no nos dejaron trabajar más».

 

De pozos y túneles

LA REPUBLICA consultó ayer al Ministerio del Interior y a la Jefatura de Policía de Montevideo para intentar confirmar si se había efecuado alguna denuncia por parte de un funcionario municipal de nombre Roberto y los motivos de la misma. En todas las instancias consultadas negaron que se hubiera producido. En la IMM no obstante confirmaron que existe un funcionario de nombre Roberto que reviste en el departamento de Desarrollo Ambiental de la Intendencia de Montevideo.

Casi al finalizar la tarde LA REPUBLICA logró contactar a Roberto que se negó a brindar detalles sobre la situación que vivió y justificó su actitud con una breve pero reveladora frase: «No quiero saber más nada, de casualidad me metí en un tema muy pesado».

 

Una historia de hace muchos años

El silencio oficial y el del propio trabajador involucrado en el caso llevó a LA REPUBLICA a consultar varias fuentes en los servicios de inteligencia a nivel policial y militar. En el ámbito policial el silencio fue la única respuesta. Sin embargo dos fuentes de los servicios militares confirmaron que el desplome de un segmento de 25 metros cuadrados de pavimento debido al arrastre provocado por un caño de OSE roto permitió descubrir una red de túneles.

Confirmaron también que se «conversó» con el trabajador municipal para evitar que una difusión «precipitada» del tema impidiera la investigación. «No sabíamos ante qué nos encontrábamos», explicaron. Los informantes señalaron que ya se realizaron exploraciones de los túneles que «están en buenas condiciones» y se descubrió que hay dos ramificaciones principales.

Una que conduce, debajo de la superficie de la calle Palmar, hacia Bulevar Artigas y tiene una bifurcación hacia la derecha. La bifurcación según dijeron se produce a mitad de cuadra entre Acevedo Díaz y Mario Cassinoni. La otra ramificación se extiende por Juan Paullier hacia Rivera y se puede vislumbrar que supera esa avenida.

Las fuentes consultadas indicaron que en su opinión se trata «de una red que realizó el MLN y que hasta ahora no había sido descubierta». Las fuentes indicaron que si la estructura de túneles llega hasta donde parece «podría llegar a tener 11 cuadras».

Los informantes recordaron que en Bulevar Artigas y Palmar funcionó muchos años la sede del Servicio de Información y Defensa (SID) y que una de las ramificaciones principales de los túneles se dirige hacia allí. En cuanto a la bifurcación que sale hacia la derecha a mitad de cuadra entre Mario Cassinoni y Acevedo Díaz recordaron que precisamente allí se encuentra el local principal de la Logia Masónica del Uruguay.

El otro gran ramal de túneles que va por Juan Paullier hacia Rivera, «parece conducir directamente hacia la Cárcel del Pueblo», indicaron. La denominada Cárcel del Pueblo donde estuvo detenido Ulyses Pereyra Reverbel, está ubicada en Juan Paullier a pocos metros de Canelones, a seis cuadras de Rivera.

Los informantes de los servicios señalaron que aún no están en condiciones de afirmar si los túneles estaban terminados y llegaban a destino. Confirmaron que «en lo poco que se pudo avanzar debido al agua, la oscuridad y la necesidad de mantener la discreción, se hallaron algunos objetos y por lo menos dos estancias amplias que tenían el próposito de servir como ámbitos de reunión». Aún no se encontraron entradas a la red de túneles y se estima que estarán en tramos que todavía no se pudieron transitar.

 

Una red del MLN

LA REPUBLICA consultó a los senadores Eleuterio Fernández Huidobro y José Mujica sobre la versión que los servicios de inteligencia militares daban sobre los túneles hallados y los dos senadores tupamaros confirmaron la existencia de la misma.

Tanto Fernández Huidobro como Mujica señalaron que no harían mayores comentarios y agregaron que el tema será analizado en una reunión de la dirección del MLN que se realizará mañana.

Incluso, el senador Fernández Huidobro aceptó trasladarse hasta el lugar del hundimiento con un equipo de LA REPUBLICA y confirmó que se trata de «una estructura clandestina del MLN, que se realizó en la década del 60″, reveló que «en esos túneles se reunió clandestinamente la dirección del MLN» y explicó que «desde esa época nunca volvió a utilizarse y nunca cayó».

Sobre la presencia en la zona de la ex sede del SID, la sede de la Logia Masónica y la cercanía de la Cárcel del Pueblo, Huidobro respondió con un lacónico «por ahora no quiero hacer comentarios». (Más información en la página 20)