Martínez Burlé: "Yo tenía esperanzas de que los militares hablaran; no se dio"

«Yo estaba en la India por una visita familiar, pero siempre que viajo a un país trato de contactarme con las organizaciones de DDHH».

Según pudo averiguar LA REPUBLICA, el embajador argentino en la India, Ernesto lvarez, conoció en esta oportunidad personalmente a Hebe Martínez Burlé y la calificó como la «heroína uruguaya». Por su intermedio, la puso en contacto con el Instituto Nacional de DDHH de la India (IIHR). El organismo se interesó por conocer a la abogada uruguaya de quien ya sabían toda su historia. El eje central del trabajo del Instituto Nacional de DDHH de la India es la educación y sabiendo que en América Latina no existe nada similar argumentaron que para ellos sería un honor si Martínez Burlé los representara en Uruguay en forma honoraria. El organismo le aportó todo el material que utiliza y que habrá que traducir ya que está todo escrito en inglés.

Después de cinco horas de reunión, el IIHR le comunicó a la doctora Hebe Martínez Burlé que habían resuelto otorgarle el Premio 2009 del Instituto. La abogada confesó que no pudo contener lágrimas de emoción.

 

«Nadie es profeta en su tierra»

«Es el primer reconocimiento que recibo, para el cual no trabajé y nunca me imaginé que esto iba a ser en la India». La doctora Hebe Martínez Burlé precisó que ella no había trabajado sola en la defensa de los DDHH. Relató todo el proceso que culminó con el procesamiento del dictador Bordaberry. Resaltó el trabajo del doctor Walter de León en esa dura y solitaria lucha durante mucho tiempo. Después se logró reunir un grupo de doce abogados que trabajó en la denuncia contra los mandos militares de la dictadura. Hebe Martínez subrayó en particular el trabajo de los abogados Pilar Elhordoy, José Luis González, Juan Errandonea, Pablo Chargoñia y otros. «Obviamente este es un premio para todos los abogados que trabajan en DDHH. Me sorprendió el premio pero además, al día siguiente, me estaban llamando de la agencia española EFE por la cual trascendió la noticia en nuestro país.

 

«No abandoné el  Nuevo Espacio»

Durante la estadía de Martínez Burlé en la India, trascendió en nuestro país que la abogada apoyaba la precandidatura de Marcos Carámbula. Martínez Burlé reconoció que a Carámbula lo conoce desde hace muchísimos años, «desde el inicio de mi militancia. Cuando me enteré de su candidatura me alegré mucho y lo llamé por teléfono para felicitarlo, en el rol de amiga. Según me contaron también , mientras no estaba aquí, trascendió que yo había abandonado el Nuevo Espacio (NE), lo cual desmiento rotundamente. Sigo perteneciendo a él y sinceramente apoyo a los tres precandidatos. Primero porque los tres son frenteamplistas, son personas a quienes les tengo entera confianza, respeto y, fundamentalmente, a quienes quiero muchísimo, aunque un análisis político no debería mezclarse con el afecto. Pero yo creo que el respeto y la admiración, pero fundamentalmente el quererlos como personas a los tras, hace que yo no pueda decir que prefiero a uno de ellos por sobre los otros. Considero que lo que voten los frenteamplistas es lo que vale. Estoy dispuesta a trabajar sea quien sea el candidato, más allá de mi posición dentro del NE, al que sigo perteneciendo y espero seguir en él.

 

«Creo en la unidad;  apoyo a los tres»

Creo en la unidad, en el consenso, hubiera preferido que no hubiera elecciones internas, pero frente a ellas, los considero a los tres calificados y reitero que los apoyo a todos. Quizás pueda ser considerada como una posición unitaria o como no jugársela, pero yo no creo estar capacitada para definirme públicamente por el afecto que le tengo a los tres. En su momento votaré por uno de ellos, como lo hará cualquier ciudadano y quiero remarcar mi profundo respeto, admiración y afecto hacia los tres. Cualquiera de ellos es capaz de llevar adelante un verdadero gobierno frenteamplista, ante lo cual yo trabajaré donde me toque, barriendo los comités, pintando paredes o trabajando como abogada, pero sigo pensando quizás con una mentalidad muy arcaica, que debemos rearmar las bases para hacer un trabajo unitario. Por ejemplo, el trabajo en el INAU, que está en el ojo de la tormenta, como el trabajo en el tema penitenciario, donde vengo trabajando desde hace mucho tiempo, es un trabajo de todos los uruguayos. Debemos trabajar más en forma grupal, con voluntariado nacional, donde todos podemos aportar un poco. Esto no radica solo en la responsabilidad del gobierno sino en la de todos y cada uno de nosotros para ir solucionando estos temas. Porque estos temas no nos son ajenos, Tengo varios amigos que van voluntariamente a enseñar oficios en las cárceles. Hay que sumar más gente a estos proyectos, así como arreglar escuelas u otras tareas que podemos hacer en jornadas de fines de semana, entre todos. Ello no solo nos permitiría sentirnos útiles y felices, sino que también hay que respaldar lo que está haciendo el gobierno que solo no puede resolver todo».

Preguntada sobre si existe actualmente una política de DDHH en nuetro país, la abogada respondió que piensa que no. «Primero tendríamos que definir qué son los DDHH, que han quedado muy circunscritos a la dictadura, las torturas, los asesinatos, las desapariciones, pero hay mucha gente que los encasilla en eso solo, como si el tema se terminara allí. Los DDHH abarcan muchísimo más, abarca a los niños, la salud, la educación, la salud de los presos actuales, entre los que tenemos un preso en domicilio porque tiene problemas de salud [aludiendo a Bordaberry] y en el Penal de Libertad tenemos 120 enfermos de SIDA que pueden morir de un simple resfrío».

Martínez Burlé insistió en que «sigo reivindicando que debe volverse al trabajo de base, incluyendo a todos los uruguayos, sean o no frenteamplistas. En definitiva, la discusión de si uno es blanco, colorado, independiente o frenteamplista se termina dos días después de las elecciones, festejamos, festejan y después tenemos que trabajar en conjunto. El Uruguay es muy proclive al trabajo voluntario. Los jóvenes nos lo recuerdan por ejemplo en campañas como la de construir un techo para mi país, se volcaron a la calle masivamente y el trabajo fue magnífico. Está el ejemplo de la Teletón, donde cada uno puede aportar un pequeño granito de arena.

En definitiva, Hebe Martínez Burlé señala que se está desperdiciando el espíritu solidario de los uruguayos. «Ese espíritu es mucho, hay mucha gente que necesita sentirse útil y no sabe qué hacer. Sería una muy buena idea utilizar el voluntariado para ello. Por supuesto, no todo se va a solucionar de un día para el otro pero en la medida en que empecemos a caminar, como dice Serrat, podemos ir haciendo el camino. Mientras no empecemos cada vez estaremos más lejos. En ese sentido pienso que debería movilizarse más al pueblo uruguayo».

 

«Anular la Ley de Caducidad»

Martínez Burlé señaló que la mentira que se le comunicó a Macarena Gelman sobre el enterramiento de su madre «es un plus de tortura sobre ella, que tuvo que enfrentarse a una nueva identidad, que desconocía totalmente su pasado, que tuvo que enfrentarse a una situación durísima que, en lo personal no puedo llegar a comprender hasta dónde debe ser espantoso, terrorífico y encima que la lleven a pararse frente a una tumba vacía. Yo tenía esperanzas de que los militares hablaran, no se dio. Pero en la medida en que se anule la Ley de Caducidad quizás los mandos medios, más allá de la lealtad a Gavazzo, y como hay mucha gente que se siente mal con su conciencia y necesita hablar, quizás se consiga información. porque el grueso de información que llevaron a objetivos reales fueron anónimos y muchos de ellos provinieron de las FFAA. Yo creo que habría que ser mucho más exigente en la búsqueda de información. No es lo mismo la mentira de la calle que la mentira al Presidente de la República y al país. Entiendo que debería haber responsabilidades. La imagen de
las FFAA de este país deben limpiarse también. Hay mucha gente que no tuvo nada que ver y sin embargo está en el mismo paquete en donde están los demás. Que alguien sea militar no quiere decir que sea un torturador, un asesino o un desaparecedor de niños. Hay gente muy bien dentro de las FFAA, así como la hubo y espero que cada vez haya más, que se encuentran en un pozo de lodo confundidos con un grupo de personas de terror. También para las FFAA es muy importante que se diga la verdad. Como dice Víctor Heredia, es importante ver los desfiles militares, como cuando éramos chicos y que los sentíamos con emoción y no ver pasar un camión del ejército y rememorar viejos momentos de oscuridad. Sinceramente creo que la gran característica de nuestras FFAA, a diferencia de otros países, es que fueron democráticas. Es más, sacaron a Bordaberry porque quería eliminar el voto y los partidos políticos. Obviamente Gregorio Álvarez se encandiló con el poder, le gustó y transformó una dictadura cívico-militar en solo militar. Ahora corresponde a las FFAA limpiar su propia imagen.