"Necesitamos un sacudón ético y moral", afirmó Mujica en el Cerro

«La comunicación directa con la gente es casi una obligación» ahora que «empezó a correr la guita» y los partidos Nacional y Colorado contrataron muchísimo espacio publicitario, dijo Mujica. «Nosotros preferimos prestarle dinero a los pobres para que se revuelvan» mediante el fondo de fomento de la Fundación Raúl Sendic, dijo marcando distancia.

Respecto a las versiones sin ningún fundamento acerca de su malestar físico tras el resfrío que contrajo en Trinidad, la capital de Flores, donde realizó una caravana de vehículos con la ventanilla abierta y una caminata de dos cuadras, Mujica negó que sea un impedimento.

«Es una gripe común y atorranta de las que hay por todos lados», diría luego con sorna a los periodistas de los canales de televisión, que lo atosigaron con preguntas. Mujica se encargó de desmentir, con paciencia, que nunca guardó cama desde que se resfrió el jueves. «Me tengo que cuidar un poco del frío de la noche», acotó. Hoy continúa con su campaña, dijo.

El precandidato oficial del Frente Amplio convocó a los frentistas a continuar la campaña electoral con «el corazón caliente, pero la cabeza fría» para evitar provocaciones lanzadas como «insinuaciones que pueden significar agravios».

 

No mencionó a nadie en particular.

«El pueblo sabrá castigar a los que atentan contra la unidad», advirtió el líder izquierdista.

El discurso del precandidato José Mujica se centró en un fuerte llamado a la unidad de la izquierda como una herramienta para impulsar los cambios sociales junto a la centra única de trabajadores PIT­CNT y aventó dudas e incertidumbres sobre los efectos de la crisis.

Participaron el senador Eduardo Lorier, secretario general del Partido Comunista de Uruguay (PCU), la senadora Lucía Topolansky del Espacio 609 y el diputado Luis Rosadilla de la Corriente de Acción y Pensamiento ­ Libertad (CAP-L), junto a ediles de la Junta Local.

«Debemos levantar todas nuestras banderas para expresar con claridad que la unidad de la izquierda es la garantía para ganar» en las elecciones nacionales previstas para el domingo 25 de octubre, arengó el precandidato.

Para Mujica, el próximo gobierno deberá erradicar la indigencia y abatir la pobreza «removiendo recursos que nunca imaginamos que tenemos».

Los frenteamplistas «debemos sacudir el sentimiento solidario de la orientalidad» que nos caracterizó desde los tiempos artiguistas porque «necesitamos un sacudón ético y moral» debido a que «sin compromiso» con la Nación sería imposible «cambiar la realidad social».

«Es inaceptable que todavía haya compatriotas que vivan en casas que se inundan», criticó Mujica, para quien es imprescindible que el Estado intervenga en la economía para «asegurar un escalón mínimo de dignidad para todos» y para garantizar la equidad social.

«No den pelota a los que dicen ‘qué horrible que está el mundo’ y que estamos poco menos que postrados. ¡Pindonga!», exclamó Mujica.

Explicó que los uruguayos hemos dejado de preservar nuestros sentimientos colectivos de «solidaridad», así como «el sentido de clase».