Un paso al costado: son varios los legisladores que no repetirán

Cuando el 15 de febrero del año que viene comience un nuevo período parlamentario, muchas de las caras que hoy son cotidianas en el Palacio Legislativo dejarán de formar parte del escenario.

Pero no desaparecerán fruto del sometimiento electoral, sino por decisión propia adoptada ya desde hace algunos meses. Uno de los autoexcluidos será Washington Abdala, el ex «soldado del Foro Batllista». Aunque la imagen y su futuro político se fue difuminando hace bastante tiempo cuando un día ­ese, el menos pensado­ el legislador se enteró que no sería él el promovido como precandidato por su sector. Abdala estaba de vacaciones con sus hijos en Orlando, Estados Unidos, y una mañana en medio de un desayuno leyó por Internet que la cúpula de dirigentes del Foro había optado por Luis Hierro López y no otro para pelear la candidatura única del Partido Colorado. Cuando regresó del Norte hubo reclamo de explicaciones y nada. Abdala se retiró del sector político al que siempre perteneció y creó una corriente propia a la que llamó «Podemos Más» con la intención de pelear en la interna colorada. La realidad económica y organizativa fueron más fuertes que los sueños: «Podemos Más» se desintegró a los dos meses de creado y hubo quien mencionó, con un dejo de maldad, que al nombre del sector de Abdala había que agregarle al comienzo un «No». Washington Abdala se retira este año de la actividad parlamentaria. Guido Machado, un histórico del Foro Batllista proveniente del departamento de Rivera, es otro que dejará la actividad política visible. Golpeado por los vericuetos políticos departamentales que lo alejaron de ocupar el primer lugar en la lista de candidatos, puesto que sí tendrá el actual intendente Tabaré Viera, le sonó como un tiro de gracia y resolvió alejarse de la orgánica colorada para dedicarse de lleno a su profesión durante los próximos cinco años. Tabaré Hackenbruch, el «hijo del», también abandonará y este será el último año de su visibilidad parlamentaria. El legislador canario incluso se mudó con su familia para Montevideo, lo que no es poca cosa para alguien que le debe a Canelones todo su currículo político. El integrante de la Corriente de Acción y Pensamiento­Libertad, Luis Rosadilla, también se aleja de la actividad política visible y no estará en el próximo gobierno pero, a diferencia de los otros citados, hará campaña electoral hasta el final. El distanciamiento de Rosadilla lo anunció tiempo atrás a este diario y lo fundamentó en la necesidad de que «jóvenes ocupen más lugares en el parlamento». Uberfil Hernández, del MPP, el suplente que más tiempo ejerció en la presidencia de la Cámara de Diputados durante el ejercicio 2008 también se distancia y andará inmerso entre cepillos, sierras y virutas en los 5 años venideros, dedicándose a su profesión de carpintero. El senador de Claveles Rojos ­ Espacio 609 Víctor Vaillant también adelantó su alejamiento de la actividad política, «mitad por los años que tengo y mitad para darle lugar a las nuevas generaciones» había dicho ya hace algún tiempo atrás a LA REPUBLICA.