PIT-CNT exige topear hasta el 10% del PBI para pago de deuda externa

El PIT-CNT concluyó la elaboración de un documento de 35 carillas que contiene las demandas y aspiraciones de los trabajadores organizados para el próximo período de gobierno.

El documento será presentado el próximo 19 de agosto a la fórmula presidencial nacionalista, conformada por Luis A. Lacalle y Jorge Larrañaga, y una semana más tarde el miércoles 26 del corriente, a la dupla presidencial del Frente Amplio integrada por José Mujica y Danilo Astori.

La idea del PIT-CNT es que quienes tienen chances de alcanzar la Presidencia de la República a partir del próximo 1º de marzo, fijen su posición, de forma anticipada al acto eleccionario del 25 de octubre, en torno a una serie de reclamos que tienen en carpeta los trabajadores organizados.

En tal sentido, el documento al que tuvo acceso LA REPUBLICA demandará a las dos fórmulas presidenciales que tienen chances de ganar la próxima elección nacional que «el bien público nacional y las urgencias sociales serán prioritarios por encima de todo pago de la deuda externa u otros compromisos contraídos con los acreedores internacionales», y en este contexto se exigirá que «los pagos por deuda pública tendrán un límite del 10% de los ingresos del presupuesto nacional, recuperando así excedentes para reinvertir en el desarrollo del país».

También se pedirá el compromiso para que en el próximo período de gobierno se establezca por ley «un nuevo Frigorífico Nacional estatal cogestionado por los trabajadores y pequeños y medianos productores» que fije los precios del consumo y que garantice «el abasto interno». Además, la «creación de un Ministerio de intereses marítimos, fluviales y portuarios» y «la creación de una flota pesquera del Estado y un frigorífico pesquero del Estado que sea parte del Frigorífico Nacional», dice el documento.

En materia de comercio exterior, el PIT-CNT reclamará «priorizar el comercio con la región, fortaleciendo el Mercosur y articulando con el resto del continente, en especial el ALBA» y, en este contexto, eliminar las transacciones en dólares y recurrir a las monedas locales cuando el comercio sea regional.

En tal sentido, el PIT-CNT dejará en claro que «se rechazará toda forma de dependencia con los centros internacionales de poder económico como el ALCA, el TLC, el TIFA, o cualquier denominación que disfrace el sometimiento y la entrega de la soberanía nacional a poderes transnacionales», sostiene el documento.

En el capítulo sobre la Reforma del Estado, el texto elaborado por la cúpula sindical señala que se debe producir la «incorporación de los trabajadores en todos los ámbitos de decisión, incluyendo a los directorios de los entes y servicios descentralizados, a fin de ser parte de la planificación de las políticas estratégicas en dichas áreas».

En cuanto al desarrollo productivo, el PIT-CNT entiende que se debe llevar a cabo un «Plan Agrario Nacional» que, entre otras cosas, «establezca una línea estratégica en defensa de nuestro patrimonio». Por tanto, dice el documento, se deberá «aprobar en forma urgente leyes que limiten la concentración y extranjerización de la tierra, fijando topes a la tenencia de tierra en función de los rubros productivos, necesidades de la producción y regiones productivas». A la hora de exigir propuestas en materia de políticas sociales, el PIT-CNT planteará «establecer un porcentaje, en el entorno del 20% del IRPF correspondiente a las rentas de trabajo, con destino al Fondo Nacional de Vivienda» y «eliminar el IVA para la construcción de vivienda de interés social, aplicar un impuesto progresivo a las viviendas desocupadas y gravar fuertemente los terrenos baldíos en las áreas urbanas».

Sobre política salarial se reclamará que los sueldos y las jubilaciones más sumergidas sigan siendo beneficiadas a la hora de recibir aumentos de retribuciones y que la pauta de ajustes salariales contempla «aumento por inflación general para que no haya pérdida de poder de compra en ningún sector, incremento por productividad u otros indicadores de rendimiento con una base mínima por rama y un componente calculado por empresa, que es donde se gesta la productividad, y mantener un ritmo superior de aumento del Salario Mínimo Nacional».

En cuanto a la energía, la idea del PIT-CNT es que se elabore un «Plan Nacional de Energía, que atienda las necesidades del país de aquí a 30 años, contemplando las diferentes alternativas energéticas con un rol principal en producción y distribución por parte del Estado».

En relación al desarrollo de la energía nuclear, el documento señala que «se debe priorizar otro tipo de alternativas antes de discutir la opción, sin que ello necesariamente implique descartarla. Entre los principales puntos críticos a considerar en el debate nuclear se incluye la cuestión ambiental, de desarrollo sustentable, de costos y de tiempo de construcción».