Topolansky invitó a enrolarse como  voluntarios para construir viviendas

La senadora del Movimiento de Participación Popular, Frente Amplio, Lucía Topolanksy, invitó ayer a la ciudadanía a enrolarse «como voluntarios en cuadrillas» para construir viviendas y paliar el déficit habitacional, lo que será una de las prioridades del gobierno que asume el 1º de marzo.

Presentó como fórmula la firma de un contrato con la asistencia comprometida de 8 horas semanales, renunciando al salario y preservando la asistencia por accidentalidad. También incluyó el aporte laboral de los presos.

Topolansky, entrevistada en una audición radial, convocó a que «a partir del 2 de marzo, los uruguayos colaboren para la construcción de viviendas», para lo cual, indicó que sería oportuno que el trabajo voluntariado lo puedan realizar «no solamente los beneficiarios de las nuevas casas, sino con el aporte de la sociedad toda».

La legisladora, y esposa de José Mujica, instó a hacer «que este quinquenio que nace sea muy creativo y que repose en ustedes, y por esa razón estoy convocando a empezar a movilizarse y cuando Pepe (Mujica) largue el vamos, estemos ahí, como un gran ejército ayudando y ayudándonos».

La senadora puso algunos ejemplos del aporte solidario y voluntario que podría concretarse desde marzo para asistir la emergencia habitacional. Planteó como propuesta comprometerse a «ir dos tardes por semana, entre las 12.00 y las 18.00 horas, y eso se anota en una planilla, y esa viene a ser mi planilla de trabajo voluntario, tan importante de respetar como mi trabajo asalariado».

En tal sentido, planteó como fórmula para instrumentar el voluntariado la firma de un contrato «en el que se renuncia al salario y a la cobertura social y sólo queda cubierta la accidentalidad».

Incluso, la legisladora fue más allá, y sostuvo: «A esa empresa colectiva de los voluntarios, se puede sumar el aporte de los presos, para elaborar ladrillos, ventanas, cielorrasos y paneles de madera».

Precisó que «muchas veces las familias de aquellos que están privados de libertad tienen graves problemas de vivienda».