Acto 40º aniversario. Brovetto ratificó la vigencia de los "principios fundacionales" de la izquierda

Tabaré Vázquez llamó a "cuidar la unidad férrea" del Frente Amplio

Ante la presencia del presidente de la República, José Mujica, el ex mandatario Tabaré Vázquez, el vicepresidente Danilo Astori y las principales figuras del gobierno y del Frente Amplio (FA), la coalición recreó en la antesala del Senado el acto fundacional que se celebró en 1971 en el Palacio Legislativo. Si bien la lista de oradores fue extensa, el mensaje de Vázquez centró la atención de todos los asistentes.

Sentado frente a Mujica, Vázquez realizó un encendido discurso en el que admitió que la izquierda aún tiene que avanzar en la profundización de los cambios y la distribución de la riqueza, sin dejar de reconocer los logros alcanzados en su gestión y en los casi doce meses de la actual administración.

«Que hay que mejorar mucho más la distribución de la riqueza, no cabe la menor duda (…) Tenemos que avanzar mucho más a través de políticas públicas, políticas sociales, seguridad social, política fiscal, impositiva. Claro que tenemos que aplicar y combinar cada uno de esos elementos para lograr una mejor distribución de la riqueza y que sean más privilegiados los que menos tienen. Pero cuidado, para distribuir la riqueza hay que generar riqueza, sino solo repartimos pobreza», advirtió Vázquez en la sala desbordada de asistentes. Consideró que los mecanismos que permitieron el crecimiento del país deben ser defendidos y que se debe actuar con «inteligencia, con cuidado». «No rompamos estructuras que están dando frutos», sentenció.

También reclamó «cuidar la unidad férrea» del FA, «sin resquebrajamiento». «Cuidar esa unidad con uñas y dientes, porque ahí está el elemento fundamental», indicó.

Pidió además el apoyo a los gobiernos departamentales y al nacional, pero dijo que no debe ser en forma «obsecuente». «Un apoyo crítico constructivo, de ideas, de discusiones, de propuestas en el momento oportuno y en el lugar adecuado y no en la competencia mediática, que le hace mal al gobierno y a la fuerza política», afirmó.

 

Sin dueño

Al igual que en 1971, los oradores y los invitados especiales se ubicaron alrededor de la mesa central, mientras el resto de los dirigentes presenció el acto sentado. La viuda del general Líber Seregni, Lilí Lerena, el ex candidato a la intendencia, Hugo Villar, y familiares del ex dirigente Juan José Crottogini, presenciaron el acto. Mientras tanto, en su discurso Vázquez nombró a algunos de los fundadores, como Seregni, el general Víctor Licandro, Crottogini, José (Pepe) D’Elía y Alba Roballo, y sostuvo que el pilar más importante que tiene la izquierda «es el pueblo frenteamplista». El ex mandatario insistió en que el «mejor proyecto político es el de la izquierda» y que la masa militante fue la que «hizo mil pedazos los certificados de defunción» que en distintas etapas se le pronosticaron a la coalición. «El dueño del Frente Amplio es el pueblo frenteamplista», opinó y estimó que los simpatizantes de la izquierda se sienten «orgullosos» y «satisfechos» «por lo hecho en 40 años y en los 6 años de gobierno».

En ese sentido, el líder de la coalición reivindicó los logros de su gobierno al señalar la forma en que se redujo la pobreza, la marginación, la mortalidad infantil, la desocupación, la legislación laboral aprobada, las afiliaciones al BPS y la política desarrollada en materia de derechos humanos.

Vázquez resaltó el hecho de que quienes cometieron delitos de lesa humanidad se encuentren presos, así como el hallazgo de restos de detenidos desaparecidos.

«Cuánto avanzamos en el terreno de los derechos humanos ¿o ya nos olvidamos que con los gobiernos del Frente Amplio la Justicia pudo actuar y aquellos que lastimaron e hirieron agravando los delitos de lesa humanidad están presos? ¿No es cierto que se buscaron archivos de la dictadura y se desclasificaron y se enviaron al Archivo General de la Nación para que la Justicia pueda investigar?», puntualizó en tono interrogante. El ex presidente resaltó las reformas estructurales que se llevaron adelante, como la de la salud y la tributaria. «Claro que hay que hacer más y se puede hacer más», sentenció al referirse al IRPF. Mencionó además la política antitabaco y el reconocimiento que logró el país por el Plan Ceibal.

 

Unidad y fortaleza

En la misma línea de Vázquez, Astori fustigó las actitudes «individualistas» en la coalición. «Acatamiento disciplinado nos guste o no. Fortalecer la unidad es tener muy claro que en la vida de nuestra fuerza política hay que saber cuándo hay que hablarle a un compañero al oído y cuándo no. Diferenciar estas dos circunstancias es crucial para la unidad y la fortaleza», dijo. Al plantear la necesidad de concretar la «actualización ideológica del FA», Astori señaló: «Fuimos capaces de encontrar juntos, unidos, respuestas, programas, acciones políticas en las instituciones, en el Parlamento, en el movimiento político, social y cultural. Y de renovar siempre el mensaje de unidad en la diversidad».

Entendió que en la coalición tienen que ser «conscientes de que el gran homenaje a nuestra historia y a nosotros mismos, los que seguimos luchando y queriendo al Frente Amplio, es su renovación, es su discusión siempre abierta y fraterna, son las nuevas formas de participación y organización que tenemos que construir juntos», expresó.

«Me siento profundamente orgulloso de pertenecer a una fuerza política que ocupa el gobierno y mantiene entre sus prioridades y discute con pasión los mejores caminos para redistribuir de forma más justa la riqueza del país. Nuestra prioridad nunca debería ser la distribución de los cargos», alertó.

En su intervención Astori enumeró algunos de los logros económicos y sociales que se alcanzaron en los gobiernos del FA. «Hoy sobre crecimiento ya no se discute. ¿Cuántos años discutimos sobre las dificultades de este país para crecer, con una perspectiva pesimista? ¿Cuántas veces se discutió la imposibilidad de que Uruguay recibiera volúmenes importantes de inversión? ¿Cuántas veces se habló del problema del desempleo? Hoy esos ya no son problemas», aseveró.

En tanto, al abrir el acto el presidente del FA, Jorge Brovetto, evocó la declaración constitutiva de febrero de 1971, rememoró frases del general Líber Seregni y los titulares del semanario «Marcha» de la época.

Ante los integrantes del actual gabinete y ex ministros, autoridades de gobierno de distintas dependencias, intendentes, legisladores, dirigentes sectoriales y representantes de las bases, Brovetto destacó la «fortaleza» política del FA.

«Hoy reafirmamos la unidad, la disciplina y el cumplimiento de los compromisos», dijo y convocó a los integrantes de la fuerza política a ratificar los «principios fundacionales del Frente Amplio hoy, como hace 40 años».

 

Oligarquía

El senador Alberto Couriel ­en nombre del Espacio 609­ subrayó que formó parte del grupo de asesores de Seregni en 1971 y que en los discursos del general se planteaba la dicotomía: «o la oligarquía liquida al pueblo o el pueblo liquida a la oligarquía».

«Los tiempos cambian, hoy hablamos de acuerdos, de negociación», remarcó Couriel y reclamó que ante la nueva realidad, la izquierda dé paso a las «redes sociales y a los jóvenes a tener una mayor participación».

La senadora socialista Mónica Xavier hizo hincapié también en la «unidad» y en la política del «consenso».

El secretario general del Partido Comunista, Eduardo Lorier, reafirmó la vigencia del FA de ser «coalición y movimiento». Consideró que la izquierda debía mantener «una conducta digna como la tuvo Seregni en la cárcel».

Añadió que el FA «supone el pluralismo, sin nadie subordinado».

Luego de realizar una síntesis sobre los 40 años del FA, el senador de la Vertiente Artiguista, Enrique Rubio, opinó que «queda mucha materia pendiente» y en ese marco mencionó la necesidad de concretar la «renovación».

El senador de Alianza Progresista, Rodolfo Nin Novoa, r
ecordó sus raíces nacionalistas y su incorporación al conglomerado que conformaba el Encuentro Progresista y su papel como compañero de fórmula de Vázquez. El ex vicepresidente auguró además el triunfo de la izquierda en las elecciones de 2014.

El senador Rafael Michelini, del Nuevo Espacio, quien fue el encargado de cerrar el acto, dijo que «valió la pena crear esta herramienta transformadora», en referencia al FA, y aseguró que proseguirá «peleando por la unidad».

 

Vigencia

Los tres delegados de base designados para la oratoria (uno por Montevideo, uno por Canelones y uno por el resto del Interior), así como el representante de la Corriente de Izquierda, expusieron posiciones más radicales que los líderes sectoriales, no solo por reafirmar la vigencia del «movimiento» sino por reclamar que se cumpla con el compromiso de anular la Ley de Caducidad, convocar a la Asamblea Nacional Constituyente y acortar la brecha entre «pobres y ricos».

También pidieron acceder a «información precisa» sobre las acciones de gobierno, para lograr un mejor relacionamiento entre los militantes y el Poder Ejecutivo.

«Se impone avanzar en la reforma tributaria y profundizar la distribución del ingreso», dijo una de las representantes de base.

El levantamiento del bloqueo a Cuba y la unión de los países latinoamericanos también fueron planteados en algunos de los discursos.

Te recomendamos

Publicá tu comentario

Compartí tu opinión con toda la comunidad

chat_bubble
Si no puedes comentar, envianos un mensaje