Falta un voto en el FA para dejar sin efecto la Ley de Caducidad

Pese a que la Alianza Progresista comunicó ayer en la sesión de la Mesa Política del Frente Amplio (FA) que más allá de los reparos que tiene sobre la iniciativa votaría el proyecto, al oficialismo le falta un voto para dejar sin efecto la norma en el Senado.

En la Alianza se maneja que el senador Rodolfo Nin Novoa salga de sala e ingrese Gustavo Gaurino. «Si el Frente decide ir para adelante con el tema, la Alianza vota», afirmó una alta fuente del sector. En cambio, en principio la posición de la CAP-L no sería igual.

El senador Eleuterio Fernández Huidobro de la CAP-L dijo a LA REPUBLICA que mantiene su decisión de no votar y que expondrá su opinión en la reunión de cabezas de lista.

El conductor de la CAP-L señaló que si el Plenario del FA decidiera mandatar a los legisladores a votar el proyecto, su grupo volverá a reunirse para definir la posición que adoptará. «El texto no nos satisface», insistió Fernández Huidobro y añadió que fueron prácticamente descartadas las alternativas planteadas por el ex senador socialista José Korzeniak en la comisión especial sobre Caducidad del FA.

«Iremos a la reunión de los cabezas de lista y daremos nuestra opinión», agregó el senador, tras ratificar la resolución de la CAP-L que señala que no pueden desconocerse los resultados de los dos plebiscitos.

El hecho de que el también disidente, Jorge Saravia no responda directamente a un sector de la coalición ­aunque haya sido electo por el Espacio 609­ lleva a que su situación se considere «particular», explicaron fuentes del FA.

Las diferencias internas, los costos políticos, las heridas con las que quedaría el oficialismo si el tema se llevará al Plenario Nacional o al Senado, formaron parte de la sesión de la Mesa Política de ayer.

 

Dudas

Fuentes de la coalición indicaron que tras el informe que brindó el presidente del FA, Jorge Brovetto sobre el resultado de las conversaciones con los senadores disidentes y trasmitir la negativa de Fernández Huidobro a apoyar el proyecto, la mayoría de los sectores plantearon la necesidad de posponer la sesión del Plenario, mientras otros insistieron en realizarla.

Asamblea Uruguay, el MPP, la Alianza Progresista, el PCU entre otros, consideraron que ante la compleja situación interna el Plenario debería aplazarse, al tiempo que el PVP y el Movimiento 20 de Mayo insistieron en realizarlo.

El Partido Socialista ­proclive también a la postergación­ planteó que si el máximo órgano de dirección se reunía el sábado, debía aprobar en primer lugar las modificaciones al proyecto interpretativo que se introdujeron en la comisión.

Delegados de base del interior a título personal, señalaron que la reunión debería aplazarse.

Ante la falta de acuerdo y las distintas visiones, Brovetto anunció que se reunirá mañana con los cabezas de lista, para evaluar la difícil situación interna.

La Mesa Política decidió pasar a cuarto intermedio hasta el jueves a las 13.00 horas, oportunidad en que el presidente de la coalición comunicará el resultado de la reunión, para luego definir si se aplazará o no la reunión del Plenario.

La posibilidad de tomar una resolución similar a la de 2010 por la que se mandate a los senadores a votar, es resistida por parte de la coalición por entender que es un tema que no puede ser aprobado «por disciplina».

El dirigente de base del interior, Alejandro Arismedi señaló a LA REPUBLICA que «este es un tema que hay que trabajarlo y tejerlo hasta el cansancio, porque es muy importante para todo el mundo. En el pasado el Frente ha tenido este tipo de problemas y ha llegado a acuerdos. Ahora tenemos la responsabilidad de ser gobierno y de votar unidos».