El director de Epidemiología cubano dijo que la isla erradicará la enfermedad

Cuba defiende eficacia del 83% de su vacuna contra la meningitis B

El alerta llegó a Cuba en el año 1983 cuando se registraron 1.400 casos de meningitis y 300 muertes, aunque ya en 1978 se había iniciado una epidemia con el predominio de los serogrupos C, con un 50% de los casos notificados, mientras que la cepa B constituyó el 35%.

El grupo de edad más afectado en 1978 fue el comprendido entre los 10 y los 14 años, seguido por los menores de un año.

Si bien se inmunizó a toda la población comprendida entre los 3 meses y 19 años con la vacuna antimeningocóccica francesa AC, la incidencia de la enfermedad continuó incrementándose, debido a los causados por la cepa B, que constituyó el 78,4% de los casos a comienzos de la década del 80.

Acción

Ante la magnitud de la epidemia, el gobierno y las autoridades de Salud de Cuba iniciaron el estudio de portadores de meningococos en la población. En 1982 se decidió crear un grupo de investigación, encargado de obtener una vacuna efectiva contra meningococos del serogrupo B.

Siete años más tarde, una vez cumplidas las fases de los estudios preclínicos y clínicos de la vacuna, que demostraron seguridad y eficacia del producto, se realizó una campaña de inmunización masiva con la nueva vacuna, la cual tuvo como objetivo a la población de alto riesgo, comprendida entre los 3 meses y los 24 años (más de 3 millones de personas), alcanzando una cobertura general del 95%.

El director del Departamento de Epidemiología, Miguel Angel Galindo, dijo a LA REPUBLICA desde su despacho en el Ministerio de Salud Pública de Cuba (en La Habana), que «si bien luego de una epidemia es lógico que los casos disminuyan, lo importante es que la tasa de incidencia cayó y se mantuvo. En 1999 sólo se registraron 58 casos en el país y 6 muertes, en una población de 11 millones de habitantes. Ahora nuestro objetivo es erradicar la enfermedad en el próximo quinquenio», señaló el jerarca.

En cuanto al debate sobre la eficacia de la vacuna, Galindo señaló que «el bloqueo (de Estados Unidos) ha intentado desprestigiar a la vacuna cubana», conocida como Vamengoc BC.

Eliminar la enfermedad

Desde 1991 con un esquema de vacunación de dos dosis –la primera a los 3 meses y la segunda a los 5 meses–, la vacuna Vamengoc BC quedó incorporada al Programa Nacional de Inmunización del MSP de Cuba.

Los resultados de estudios conducidos en Cuba sobre esta vacuna estimaron que su eficacia clínica era del 83% en adolescentes de edades comprendidas entre los 10 y 16 años.

Se determinó además, que el impacto directo de la vacunación en la isla motivó una disminución en la morbilidad entre los niños de 0 y 5 años de edad y en las tasas de incidencia de la enfermedad en éste y otros grupos de edades, con disminución del 98% de la morbilidad y 93% de la letalidad.

Instituto Finlay

Con la creación de la vacuna contra el meningococo B, se inauguró en La Habana en 1991, el Instituto Finlay, Centro de Investigación-Producción de Vacunas y Sueros, que integra el Polo Científico del Oeste de la capital cubana.

La revista Avances Médicos de Cuba indica que «los meningococos se localizan por lo común en el tracto respiratorio superior y en la mayoría de los casos colonizan la mucosa nasofaríngea de forma asintomática (portadores sanos). Se considera –continúa la publicación– que entre un 5 y un 10% de la población mundial es portadora del meningococo. En una pequeña proporción de los individuos, las bacterias logran invadir la sangre y se localizan en el sistema nervioso central accediendo a las membranas meningeas que lo rodean y al líquido cefalorraquídeo, desarrollándose entonces una infección severa y en ocasiones fulminante. Los meningococos de los serogrupos A, B y C son los principales responsables de las epidemias de la meningitis y representan más del 90% de los más de 300 mil casos reportados anualmente en todo el mundo, de los cuales entre el 10 y 14% son fatales.

La población de más alto riesgo es la comprendida entre los 6 y 12 meses de vida, aunque durante las epidemias puede afectar también a niños de mayor edad, a los adolescentes y a los adultos.

A mediados del año pasado el Departamento del Tesoro de Estados Unidos autorizó, haciendo una excepción a la ley Helms Burton (que reforzó el embargo contra el régimen de Fidel Castro) la creación de una joint venture entre el laboratorio (estadounidense, británico y belga) SmithKline Beecham y el cubano Finlay fabricante de la vacuna Vamengoc, para comercializarla en su territorio.

Por otra parte, el Ministerio de Salud Pública de Uruguay finalizó el año 99, y prácticamente la gestión de esta administración, enfatizando que la vacuna cubana no se distribuye a nivel de los hospitales porque «tiene el 60% de eficacia, según la documentación internacional», respondieron las autoridades sanitarias cuando a fines del año anterior los casos de meningitis aumentaron con respecto a otros años.

Si bien se notificaron 16 casos, con predominio de la cepa B, los afiliados a las mutualistas son los únicos que pueden vacunarse contra dicho meningococo, abonando alrededor de 300 pesos para adquirir la vacuna cubana.

Publicá tu comentario

Compartí tu opinión con toda la comunidad

chat_bubble
Si no puedes comentar, envianos un mensaje